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Trabajar como socorrista en 2026 seguirá siendo una opción laboral con alta demanda, especialmente en zonas turísticas, instalaciones deportivas y espacios acuáticos. Sin embargo, los requisitos para acceder a estos puestos son cada vez más claros y definidos, ya que las empresas buscan perfiles preparados y responsables.
Conocer de antemano qué se pide habitualmente permite planificar mejor la entrada al sector y aumentar las posibilidades de contratación.
Uno de los primeros requisitos suele ser la edad mínima legal para trabajar, que se sitúa en los 16 años. Además, se exige una buena condición física, ya que el puesto implica vigilancia constante, capacidad de reacción y resistencia durante jornadas prolongadas.
Las pruebas físicas continúan siendo habituales en muchos procesos de selección, especialmente en playas y grandes instalaciones acuáticas.
Para trabajar como socorrista es imprescindible contar con formación específica en salvamento acuático y primeros auxilios. Las empresas valoran que el candidato tenga conocimientos actualizados y haya realizado prácticas reales en entornos acuáticos.
Dentro de esta preparación, cada vez es más común que se solicite disponer del título de uso y manejo del DEA, ya que el desfibrilador externo automatizado está presente en muchas instalaciones y su correcta utilización puede ser clave en una emergencia. Puedes ampliar información sobre este contenido en el curso de uso y manejo del DEA disponible en nuestra escuela.
Más allá de la formación, las empresas buscan personas capaces de mantener la calma en situaciones de presión. Un socorrista debe saber identificar riesgos, anticiparse a posibles incidentes y actuar con rapidez cuando sea necesario.
La experiencia previa, aunque no siempre obligatoria, es un factor que suma puntos en los procesos de selección y facilita el acceso a contratos de mayor duración.
En 2026, muchos socorristas trabajan en diferentes tipos de instalaciones a lo largo del año. Piscinas, playas, parques acuáticos o centros deportivos tienen dinámicas distintas, por lo que se valora la capacidad de adaptación y la disponibilidad horaria.
Esta versatilidad es una de las razones por las que el socorrismo se está consolidando como un empleo recurrente y no solo estacional.
Para aumentar las opciones de trabajo, es recomendable complementar la formación principal con cursos relacionados con la prevención y la atención en emergencias. Contar con varias certificaciones y experiencia práctica permite acceder a más ofertas y optar a puestos con mayor continuidad. En nuestra escuela puedes encontrar tanto el curso de socorrismo como otras formaciones complementarias orientadas a mejorar la empleabilidad en el sector.
